lunes, 28 de octubre de 2013

Mi nuevo primer mal día

Es bastante difícil tener la primera crisis (recaída o como quieran llamarle), a decir verdad es una sensación muy desagradable.

Como dirían los expertos en prevención en estos casos, llevaba 58 días sin accidentes, pero era de esperar que en algún momento sucedería algo así.

Los sentimientos, las emociones vividas el día de hoy no hacen referencia con mi mente y mi capacidad de establecer puntos especulativos, racionalizar, analizar y determinar hipótesis. Mi mente mejora con una rapidez que incluso a mi me sorprende, pero hoy pagué en parte el costo de dicha rapidez.

El día se mostraba tan normal y animado como siempre, pero de alguna forma, mi genio se empecinó en transformarlo en un pésimo día.

Comenzó como un pequeño dolor de cabeza que se incrementó de manera alarmante en un par de minutos, dicho dolor de cabeza fue intensificado gracias al apoyo de mis vecinos, sus gritos, su falta de respeto y cultura, además de ser el grupo de gente más desagradable del mundo, por tanto decidí, para no crear conflictos que pudiesen situarme en medio de una discusión que afectaría directamente mi mejora, ir a casa de mis padres puesto que, en casa de ellos siempre existe un lugar donde encontrar tranquilidad y silencio, más los días domingos cuando ellos están aletargados de una forma francamente alarmante.

Pero a diferencia de lo que pensaba y como haciendo el día una burla total e ignorando mi malestar, mis padres se encontraban en proceso de remodelación, es decir la paz y el silencio en esa casa era un mito, traté de esconderme en algún lugar que me diera tranquilidad ya que era imposible tener silencio, lo encontré, pero para mi mala fortuna llegaron mis tíos más ruidosos a instalar proyectores, gritar y molestar de manera casi profesional.

Era tan impresionante ver lo meticulosa que puede ser una persona al momento de convertirse en alguien desagradable, que debo decir quede impresionado, eran capaces de crear un mal ambiente con tan poco, aunque también debo dar crédito a mi ya en ese momento insoportable genio y un dolor de cabeza que ya mas bien parecía migraña.

Así que decidí salir de casa de mis padres, fue en ese entonces que me encontré con una cantidad de sentimientos, emociones, sensaciones que escaparon de mis manos, incluso estando fuera de todo sitio conflictivo me sentía ahogado, encerrado, como en un principio y mi reacción no fue la más adecuada, puesto que debía tranquilizarme y conversar con alguien o bien relajarme para no caer en una crisis, pero me asustó el pensar que podría volver a pasar todo otra vez y que este tiempo de mejora era solo una ilusión, un espejismo para mostrarme lo que podría suceder y así destruir todas mis esperanzas.

Así me encontré, diez minutos más tarde experimentando un odio hacia el mundo, un asco de mi mismo, con ganas de escapar de todo y todos, de no estar cerca de nadie, de simplemente desaparecer, quería ser nada, que no supieran de mi existencia y simplemente fuera producto de un mal recuerdo o simplemente el efecto de una imaginación activa.

Pero no, estaba ahí, parado en medio del mundo en el cual no quería estar, escondiéndome de la gente que no debo esconderme, intentando buscar formas de no estar más, independiente de su complejidad o extremismo, y si bien mis pensamientos no deribaban en muerte, se acercaban bastante, ya que en todos terminaba gravemente herido.

Pero en un momento, uno de los mejores momentos del día, logré respirar profundamente, llenando de oxigeno esos lugares que tal vez al no recibirlo lograban establecer estas sensaciones desagradables. Pensé, me relajé, pude sentir el peso de mis pensamientos y así ordenar mis ideas.

Ya había terminado el día, sufrí más de la cuenta, solo a causa de mis miedos, miedos comprensibles, a nadie le gustaría volver a mostrar lo peor de uno, sacar a relucir tus defectos más horribles y no ser capas de recordar nada de lo que has echo.

Ahora, ya comenzando un nuevo día, solo quiero dormir y despertar con mi cerebro y mi centro de emociones despejado, estar tranquilo y seguir siendo feliz, sigue siendo mi meta...

domingo, 27 de octubre de 2013

Amor Eterno


Hubo una vez en que amé a una mujer
La amé de la mejor y la peor forma,
Le regalé amor sincero,
Le regalé amor egoísta,
Le regalé mi vida a cambio de un segundo,
Un segundo de sus ojos,
Un segundo de su risa.

Ella me entregó amor verdadero,
De abrazos y caricias,
Reproches y perdones,
De silencios, miradas y risas locas.

Yo quise regalarle el mundo,
Pero no comprendí que ella,
Era feliz conmigo,
Que no hacía falta nada,
Que con estar juntos bastaba.

Pero me cegué en un amor ideal,
Como el que vemos en las películas
Y así la perdí,
Queriendo entregar mucho,
Dándome cuenta tarde que casi nada le di.

Hubo una vez que amé a una mujer,
La amo aún y seguiré amándola.
Y aunque ahora esté lejos,
Sé que puede escuchar mi voz
Cuando digo su nombre al viento,
Cuando grito por ella lo que siento,
Cuando la saludo en las mañanas
Y me despido en las noches,
Preguntándome si hará lo mismo,
Si aún pensará en mi está noche

sábado, 26 de octubre de 2013

Montaña de sueños (Perdido, encontrado, analizado y retratado)



Una mañana muy tarde
Vi la luna en medio del cielo
Vi a mi corazón cobarde
Caer muy fondo en ese agujero

Sin noción, sin sensación
Yo ya no sentía nada
El dolor me inoculó
La tristeza me llenaba

Caminé, mi vista baja
Nadie nunca vio mis ojos
Huía de las miradas
Tenía miedo de su enojo

Caminé y llegué a la cima
De una montaña virgen
Hice de ella mi refugio
Donde todo era más simple

Nadie ya podía verme
Por fin levanté la vista
Todo era lindo y verde
Mi alma se sentía lista

Entonces extendí mis brazos
Y lo malo se perdió
Fui feliz, estuve tranquilo
Mi alma de luz se llenó

Entendí que no debía
Esconder más la mirada
En cada cosa había vida
Que el mundo a mí no me odiaba

Era solo mi tristeza
Que amargó mi alma entera
Que no era el centro del mundo
No había quien me conociera

Me escondí por mucho tiempo
Recordé las enseñanzas
Aprendí mil cosas nuevas
Me dijeron vuelve a casa

Así volví caminando
Frente en alto, viendo al mundo
Ya no le tenía espanto
A quien mirara profundo

Era una persona nueva
O era el mismo ya cambiado
Era alguien que no era
O era yo, el del pasado

No era el mismo, estaba claro
Era alegre, había vida
La montaña me había enseñado
Que la felicidad no debe estar escondida

Por fin llegué a mi casa
No era extraña, la conocía
Era un trozo de mi alma
Una extensión de mi vida

Pero todo era distinto
Se fue uno, llegó otro
Había luz en esa casa
Que mostraba sueños rotos

Los recogí, los revisé
Los escogí, muchos boté
Un par de sueños uní
Otros muchos olvidé

Pasaron días y noches
Guitarra en mano cree más sueños
Escribí muchas canciones
Que no eran mías, no había dueño

Llegó finalmente el día
Que salí a mirar al mundo
Mi guitarra y mi alegría
Presenté en los suburbios

Comencé a mostrar mi vida
A quien la quisiera ver
Tristezas, llantos, risas, alegrías
Que pocos lograban creer

Que lo mejor en la vida
Es perderse en este mundo
Perderse no es una salida
Es llegar a lo más profundo

Mejor que eso es encontrarse
Poder verse en el espejo
Saber que dices y haces
Sin malos sentimientos

Ver al mundo desde lo alto
A los ojos ya sin miedo
Que sepan pedido he estado
Me encontré dentro de un sueño

Donde la realidad no es nada
No es mala, no es buena,
No hay porque denominarla
No tiene seña ni dueña

Lo que sí, vivir con sueños
Esperanza y alegría
No vivir dentro de un sueño
Que pierda tu perspectiva

Y así el mundo me conoció
Era alguien, me encontré
No era el centro de atención
No lo debía ser

Era un caminante más
Caminar ahora era un lujo
Que podía malgastar
Yo era parte de un dibujo

Un dibujo de la vida
Muy abstracto y encriptado
Ver y leer el mundo podía
Entenderlo no era malo

Me ayudó a entender mi vida
Traté de ayudar al resto
Era algo que debía

A mi montaña de sueños.

Pensamientos de una mente malograda

He pasado mi vida buscando una verdad absoluta, una verdad que me tranquilice, que disipe mis dudas y me muestre todo como es en realidad.

He pasado mi vida soñando con la felicidad plena, con ser feliz con lo mínimo y así entregar lo mejor de mí al mundo, mostrando la forma y el camino para que así todos sean felices.

He pasado mi vida inventando otras vidas, vidas muy opuestas a mi realidad, vidas en que no existe nada malo en mí, en que puedo ser el mejor de todos y tenerlo todo.

Mi vida se ha basado en mentiras y sueños, en extraños pasajes y calles ficticias, he forjado un nombre y una persona que no existe, existe pero en mi extensa y fértil imaginación, una imaginación que no deja de crear realidades abstractas, realidades que habitan en un confuso sueño, un sueño real, un sueño del que estoy intentando despertar.

Es poco factible, además de ser poco práctico crear una nueva vida u otra identidad, pero si puedo modificar muchas cosas para que el ser ficticio se sienta y se vea más real, más parecido al verdadero hombre, eso se logra partiendo desde lo pequeño y así lograr cambios gigantes.

Pero es muy difícil mostrar al mundo los cambios cuando el mundo ya tiene la peor imagen de uno, no los culpo, me forjé una reputación al no ser autentico. Mostrar todo al mundo es complicado, requiere una reestructuración a gran escala, lo que implicaría lograr los cambios de forma inversa, primero lo grande, después lo pequeño.

Me encuentro atorado dentro de mi propia conjetura, ¿hacer lo mejor para mí o para el resto?

Es muy complicado, la soledad que es la compañera ideal para resolver estas disyuntivas es un arma de doble filo, ella siempre muestra los dos lados de la moneda.

Por un lado logra enseñarte que estar solo no es malo, muchas veces es necesario, te ayuda a ver desde un paralelo distinto el mundo, te muestra tu mundo, te muestra quien eres, porque a la soledad no le puedes esconder tu naturaleza, con ella puedes mirarte a fondo, puedes ver tus fortalezas y falencias, entender tu propias verdades y mentiras, ver al ser real, sin mascaras donde escudarse con el personaje creado y adaptado al mundo y su sociedad ambigua.

Pero también te muestra el lado amargo de estar solo, la falta de personas a tu alrededor crea nuevos vacíos, falsas realidades, pensamientos molestos y traicioneros, te vuelve vulnerable, los mismos pensamientos te llevan por caminos errados y muchas veces te incita a realizar actos anti natura.

Podemos vivir solos pero no vivir de la soledad, debemos lograr un equilibrio y rodearse de gente que te llene, que te entregue algo, una palabra, una enseñanza, un consejo, risas, pensamientos, alegría.

Es en este punto en donde me encuentro, mejorar para estar bien conmigo y ser distinto implica estar solo por más tiempo del que pensaba estaría, a su vez lograr cambios significativos, notorios, gigantes para que los note el resto implica realizar algo ahora sin tener seguridad de los resultados.


Por ahora prefiero mejorar y estar bien conmigo, así finalmente la gente verá una versión más completa de la persona que quiero ser, un ser más cercano a la realidad, que vean al ser que he visto ahora que estoy solo.

viernes, 25 de octubre de 2013

Enseñanza de la tierra sobre el cielo

El mundo camina sin notar que perdieron la capacidad de sorprenderse...

Mientras caminaba por la ciudad, mientras el mundo iba apurado, entraban en tiendas, se detenían a ver a los cantantes, payasos y vendedores ambulantes, hablaban y se movían a muchos lugares, me detuve a contemplar a una mujer que miraba el cielo, ensimismada de algo que yo (y al parecer nadie que pasaba cerca de ella) no lograba comprender.

Me acerqué a ella, la observé por un lapso considerable de tiempo, me senté a su lado queriendo preguntar que era lo que la sumía en esa expresión de asombro, luego de un tiempo logré entender que solo miraba las nubes que atravesaban el cielo en aquel momento, le pregunté sin reparar en las molestias que podría causar cual era la razón de mirar las nubes, tras lo cual ella sin quitar la vista del cielo me preguntó si yo sabía porque estaban las nubes ahí, la respuesta lógica (la cual obviamente entregaría) era que se debía a las condensación de los vapores que creaban esas formaciones nubosas, pero antes de responder y como si leyera mi mente me dijo que más allá de la lógica, las nubes estaban en el cielo con el simple fin de deleitarnos, que era parte de su actuación diaria, que los días podían ser iguales, monótonos y repetitivos pero las nubes siempre serían únicas, que nunca encontrarías dos iguales.

Por un momento quedé inmerso en esas palabras, en ese extraño pensamiento, en buscar una razón lógica que me entregara la respuesta coherente de lo que ella afirmaba, luego entendí que no había necesidad de encontrar un significado importante o profundo, una razón total, ya que al hacerlo me estaba perdiendo el espectáculo que presentaban ese día las nubes.

Por mucho tiempo fui al lugar para encontrar a esa mujer y agradecer la enseñanza, pero no la volví a ver.

Aun así, sigo viendo al cielo y me impresiono con el espectáculo diario, diverso y gratuito que entregan las nubes

El fin del cuadrado, el comienzo del círculo

Es fácil comenzar a escribir cuando lo peor ya ha sucedido, cuando mi mente vuelve a ser tan analítica y racional como hace mucho tiempo no lo era, cuando por fin he decidido las reales directrices de mi vida.

Con solo 26 años y una serie de intentos de suicidio, demencia temporal, daños causados tanto a mi como al entorno que me rodeaba, me quedé solo, dependiendo de drogas para salir adelante, perdiendo el control total de mi vida.

Noches de soledad, extrañamente tranquilo, pensando en la suerte que tengo de seguir con vida y que la angustia, la pena y la desesperanza no impedirán que siga adelante en mi camino.

Estoy contento de seguir aquí, la soledad no me está haciendo mal, muy por el contrario, estoy tranquilo, relajado, de a poco volviendo a la vida que tenía antes de todo lo que pasó.

Pienso y reflexiono sobre todo lo que ha sucedido, intentando descubrir las razones por lo que todo pasó de esta forma, intentando entender la razón para no haber hecho algo antes de que todo se saliera de control, cuando comencé a vivir de sueños y distorsioné la realidad, en eso estoy ahora, viviendo de la realidad, la realidad sea buena o mala es mejor que pasar en sueños, sueños y fantasías que lo único que logran es distorsionar más mi mente, transformar mis pensamientos, llenarme de mala onda y lograr desanimarme.

Estoy mejor, más relajado y tranquilo, ya más calmado, aún con el sentimiento en mi corazón que las cosas irán mejorando con el tiempo, el sábado tuve una noche terrible, sucedió algo que desearía nunca hubiese pasado y nunca vuelva a pasar, perdí muchas cosas, perdí mis anillos, que más que un símbolo eran un compromiso, tuve una conversación directa, franca, sin adornos, dije lo que sentía, dije la verdad.

Ahora de a poco estoy arreglando mi vida, de a poco vuelvo a mi casa, ahora es tiempo para estar tranquilo, ser feliz, el resto se dará solo, sin forzar ni apurar nada, ahora es tiempo para dejar que fluya todo.

Así comienza un extraño y nuevo recorrido, el cual pretendo hacer por esta vía, mostrando algo que poca gente conoce de mi, mi lado oculto, mi lado introspectivo, el mismo que me está ayudando en este momento a salir adelante.

Más que confesiones de vida, es en gran parte una demostración de valentía, de hacer algo de lo cual no me sentía capaz de realizar, el compartir mis vivencias y extraño arte con el mundo.

Espero que les pueda ayudar, espero que disfruten de mi arte, mi visión de la vida, angulosa, pragmática, a veces inocua y otras veces demasiado extrovertida.

ENJOY :D