domingo, 29 de diciembre de 2013

Bye, good (Dedicada a todos mis seres queridos)

Aunque ustedes no lo noten, yo no soy el de antes, no estoy bien, he intentado de muchas formas estarlo, pero no puedo lograr estar bien, esta última semana he pensado muchas cosas, he pensado en la gente que está conmigo, en la que se fue, en los que no estarán más, en los que tal vez nunca estuvieron, en los que quisiera conocer mejor, en los que no debieron entrar en mi vida.

Algo cambió en estos días, un pequeño pensamiento es como una semilla, no te das cuenta como comienza a crecer y de un momento a otro es tan grande que no logra pasar inadvertido, ocupa toda mi mente y no me deja descansar un segundo.

Creo que no tengo nada más que hacer aquí, la persona que soy hoy en día es un monstruo, un ser humano destinado a destruir todo lo lindo que puede haber a su alrededor, una persona tan infeliz que intenta hacer infeliz a todos los que hablan con él.

Necesito nacer, pero para nacer debo morir y aunque he intentado matarme varias veces, tengo miedo a morir, no quiero irme de este mundo sin dejar huella en él, si muero seré simplemente uno más en el mundo, mi cuerpo será olvidado y nadie recordará mi nombre.

Necesito nacer y para eso debo morir, necesito comenzar de nuevo, realizar una nueva versión de mí, una que no esté malograda, una que no tenga problemas tan graves como los tengo ahora.

Debo comenzar una nueva vida, debo olvidar todo lo que me ha dañado en esta vida y abandonar todo el odio y el resentimiento que tengo hacia mí.

Debo decir que ha sido gratificante y enriquecedor haber conocido a tanta gente linda que alegra la vida, gente que no espera nada, que están de forma desinteresada junto a mí, agradezco a todos los que han estado conmigo, los que han regalado un poco de su vida para completar la mía, las enseñanzas de vida, soy un ser demasiado inteligente, lamentablemente nunca he ocupado esa inteligencia para cosas buenas o constructivas, de lo que soy totalmente ignorante es de la vida, es algo de lo cual nunca he podido aprender ni apreciar, pero siempre han estado personas que me han enseñado sobre la vida, el amor y la casualidad.

Este año estaba escrito que debía morir, que era urgente el llamado a nacer puro, limpio y sin pensamientos traicioneros, un hombre nuevo, sin mentiras de por medio, sin dar lástima por la vida, sin manipular a la gente, alguien con un corazón y una mente limpia y funcional.

Esto es lo que debo hacer para no seguir cometiendo errores los cuales es posible que lleguen a un destino fatal.

Agradezco a la vida por la gente que me puso en el camino, a los que me permitieron entrar en su vida y los que por voluntad propia estuvieron en la mía, a todos los que me regalaron una sonrisa y un abrazo, una palabra de aliento o quizás un reto merecido.

Los quiero a todos, a los que están, a los que se fueron y los que están en un paralelo que no quiero visitar aún.

A mí me toca morir esta vez, pero espero verlos pronto, decirles con una sonrisa sincera que estoy bien, abrazarlos y retribuir todo el amor y cariño que me han dado.

Espero verlos pronto, yo muero para nacer y entregar verdad y amor al mundo, un amor que me han entregado y no he logrado retribuir.

Gracias y espero que tengan una excelente vida, yo iré a buscar la mía.

Esto no es un adiós, es un hasta pronto, por lo mismo no diré good bye, sino que diré bye, good.

See ya :)

100 horas de insomnio

Llevo 100 horas sin dormir y me puse a caminar por lugares que no recorro habitualmente, vi un gato jugar con un grillo, vi palomas acercarse y alejarse porque yo era un elemento extraño en su hábitat, vi una mujer dar comida a su hijo, vi personas sentadas en los solares de sus casas viendo pasar la vida, vi un par de ancianos que como adolescentes se tomaban de la mano y se declaraban su amor en un susurro, vi muchachos dibujar un mundo en una pared.

Vi tantas cosas y nada me logró sorprender, eso me dio pena, siento que estoy llevando un peso en mi mente que no soy capaz de cargar, perder la capacidad de sorpresa es lo más triste que puede pasar en la vida.

El mundo no es más pequeño, el mundo sigue siendo el mismo, solo que ya no queda nada en él.

viernes, 27 de diciembre de 2013

Pastillas

Necesito tomar pastillas para dormir, necesito tomar pastillas para despertar, necesito tomar pastillas para el dolor de cabeza que me produce el seguir vivo.

Llevo tres días sin salir de mi casa, llevo dos días sin dormir, llevo el peso de mi conciencia por todo lo que soy ahora, cargo con algo que no puedo combatir.

Estoy cansado, aburrido, si fuese capaz de enumerar cada una de las cosas que no puedo mejorar estoy seguro que terminaría más deprimido de lo que estoy.

Todo sigue igual, por más que intento cambiar las cosas, todo sigue igual, quizás no lo hago con toda mi alma, quizás solo doy lo que se necesita para sobrevivir, aún así todo sigue igual.

Me molesto con facilidad, las cosas me superan a cada momento, dudo de todo y de todos, me siento vulnerable y solo, siento que la gente solo está por lástima, para no quedar mal con sus propias conciencias, siento que si salgo de casa no tendré la fuerza necesaria para volver, quiero salir y tengo miedo de hacerlo, no quiero estar solo, pero la simple idea de hacer sufrir a otra persona me supera.

No quiero hacer más daño y por eso termino dañándome, sigo pensando en cosas que nublan mi vista, cada segundo soy más consciente de mi realidad y eso me da pena, porque incluso con la capacidad de analizar todo, sé que el problema sigo siendo yo.

Sigo pensando que la muerte es el paso lógico para concluir todo lo que me pasa, pero no quiero hacerlo, todavía siento que existe algo en mí que se puede salvar, todavía siento que existe esperanza para mí, todavía creo que algún día podré ser feliz

Nuevamente aburrido

¿Qué hacer cuando pierdes las ganas de seguir adelante y el aburrimiento conlleva a pensamientos que estaban desapareciendo?

De alguna manera sigo creyendo que podré mejorar, pero cada día que pasa siento que todo empeora.

Ya no tengo ganas de despertar, quisiera dormir todo el día, no quiero hacer nada, me gustaría no tener que levantarme nunca, no saber que pasa en el mundo y simplemente quedarme acá, desaparecer de las mentes del mundo y ser nada.

No quiero mejorar, no tengo ganas de mejorar, los medicamentos no me ayudan a mejorar, aún no estoy seguro si podré mejorar alguna vez.

Me siento tan aburrido de todo, todo el tiempo, pero aún así hago todo lo posible por mejorar, contradictorio como suena, sigo intentando mejorar.

Han pasado muchas cosas estos días, pude hablar con una persona muy importante para mi, estuve con mi hija y mi familia y por no controlar mis estados de ánimo perdí a la mujer de mi vida tal vez para siempre.

Quizás no quiero mejorar porque no puedo ser feliz.

martes, 24 de diciembre de 2013

Autenticidad y extrajería

Estos días han sido bastante anormales (más anormales de lo que es habitual en mi anormal vida), son extraños sentimientos, extraños pensamientos.

Siempre he sabido que por más que he intentado nunca había logrado ser auténtico, hasta ahora siempre había sido un camaleón, adaptandome al entorno de mis pares y la gente con la que me relacionaba, pero estos últimos meses, meses en los cuales me ha acompañado la soledad, he logrado ser totalmente auténtico en todo sentido, en pensamiento, en mi forma de ser, de vestir, de comunicarme.

Ha sido dulce y agraz, me gusta ser así, me hace feliz ser yo, pero me da mucha lata que los cercanos,mis amigos y cercanos se burlen de mi nueva forma de ser, me hace cuestionarme sobre si debo seguir siendo auténtico, porque lamentablemente los cuestionamientos me han dolido más de lo normal.

Además he realizado bastantes cambios que han creado un nuevo mundo, mi casa ya no es mi casa, todo es tan lejano, como si fuese un lugar al que vengo de visita.

Recuerdo que una vez leí un libro llamado el extranjero, trataba de un hombre que era extranjero en todas partes, así me estoy sintiendo en estos últimos días, un extranjero en todas partes, con mi mochila a todas partes, como si pasara mochileando todo el día, en todos lados.

Creo que debo arrancar.

martes, 17 de diciembre de 2013

Egoísmo, tentación y sabotaje

Otro día más, suspendido en la esperanza de que pueda ser mejor que el anterior.

Pero eso no va a pasar.

La verdad es que mis objetivos para la recuperación siempre han estado destinados al beneficio de la gente que me rodea, o por lo menos eso suponía.

Hoy fui al psiquiatra, me sentía bien, pero no era así, en el camino me bajó la angustia, las ganas de volver a casa, de encerrarme y no salir más, fue solo al volver a casa que comprendí que mi mente me sigue saboteando, que continúa jugando conmigo.

Estos días han sido bastante raros, nuevamente tengo un sentimiento de culpa por las cosas que hice, otra vez siento que no avanzo, me siento vulnerable, tentado a cometer todo tipo de cosas que me afecten.

He analizado todo y no tengo nada.

Sigo pensando en mejorar para el resto pero mi mente se comporta de forma egoísta y no deja de atormentarme, siento que fracaso otra vez y que ya no hay solución a mis problemas.

lunes, 16 de diciembre de 2013

La culpa de las consecuencias

Es deprimente comprender los hechos que eran tan comunes.

Se muestran como algo fascinante, darme cuenta que lo normal es más complicado de lo que pensaba, lo que me deprime es comprender el sentido de mis acciones, ser el culpable de las consecuencias, saber que todo lo que persigo, mis metas, mis compromisos, mi código de moral, no se rige por lo que esgrime la sociedad, pero soy capaz de insultar al mundo por no seguir sus propios códigos. 

Los códigos sociales son bastante simples, muchas veces los odiamos, pero dichos códigos nos llevan a un final consecuente, muy por el contrario mis códigos son bastante complicados y llevan de una mentira a otra. 

Es triste saber que todo lo que guía tu vida es para continuar una mentira mucho más grande.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Nostalgia

Otro día cargado de sentimentalismo, de recuerdos que se mantienen en la retina de la eterna soledad, nostalgia de comprender que solo vivo de recuerdos, que otra vez estoy notoriamente estancado, atorado en mi prisión mental, intentando recuperar un poco de mi estabilidad emocional perdida.

Otro día que si bien comenzó hace muy poco ya tiene tintes de ser otro día común y a decir verdad lo común ya me tiene bastante aburrido.

Mi mente sigue buscando fantasmas, sigue realizando grandes ideas y proyectos que en las circunstancias actuales resultan inviables.

Mi mente, con su extenso y total conocimiento de mí, logró una vez más nublar mi vista, desviar en parte mi foco de atención, me recordó que yo y solo yo soy el gran culpable de las cosas que suceden a mi alrededor, en eso se ha transformado mi vida, en un gigante yo y solo yo, porque de forma inconsciente, o tal vez bastante consiente me he alejado de mi entorno, si bien tengo a todos mis seres queridos cerca (los que aún quieren estar conmigo), me siento lejano a ellos, como si me encontrara en otro paralelo, cerca en cuanto a distancia pero no en cuanto a sentimientos.

Siento nostalgia de saber que aún rodeado me siento solo, que aún con el cariño que logro recibir me siento vacío, que nuevamente me he despojado de mis sentimientos.

Una persona sin sentimientos tiene una excelente capacidad para analizar y retratar factores y hechos de una forma clara y racional, pero en vista y consideración de mi actual estado no es lo que quiero, mi mente volvió a jugar ese juego que nunca he podido ganar, quizás si no tuviese todos esos recuerdos podría ganarlos, pero al fin y al cabo soy hombre...

viernes, 6 de diciembre de 2013

Actos preconcebidos

Pensar que todo comenzó con una visita anunciada, un poco de mal humor (tal vez por efecto del consumo de sustancias alucinógenas) y la idea que rondaba en mi mente desde que tengo uso de razón.

Hay días en que simplemente existo, pero existen otros días como hoy, en los cuales simplemente siento vergüenza de seguir vivo.

Las veces que por mi mente a pasado la idea del suicidio son innumerables, las veces que he intentado consumar dichos pensamientos son tres.

Es difícil suponer que una mente tan divergente como la mía logre tener pensamientos mas bien cercanos al colectivo, mas no es difícil comprender que dicho pensamiento es para la mayoría de las personas solo eso, un pensamiento. He aquí donde ocurre la división o el tan denominado refrán "del dicho al hecho...", donde están las personas que lo han pensado, las personas que han analizado la posibilidad y las personas que lo hemos realizado. Porque dicha diferencia, porque el atentar contra la vida es un acto que por si mismo es inconcebible, pero que desemboca cuando dichos actos suceden por ideas preconcebidas, cuando determinadas circunstancias nos llevan a tomar la mortal decisión.

Nunca crean cuando alguien dice que es una decisión difícil, porque no lo es, este tipo de decisiones son tomadas en las circunstancias adecuadas, en los momentos precisos y siempre son rápidas.

Muchas veces solo vivo los días sin pensar si son realmente productivos o lograron un cambio en mí, simplemente suceden, como suceden todos los actos preconcebidos por mi mente distorsionada, disfuncional, dispersa, que no para de establecer ideas nuevas, actos autoconspirativos, que crea fantasías que se ven bastante reales y que solo buscan un mismo desenlace, el volver a intentarlo una vez más ya no tan interesado por el simple hecho de morir, sino por saber si esta vez podré finalmente lograrlo.

Hace un par de días era simplemente otro loco en este mundo, otro loco buscando respuestas, ahora me doy cuenta que siempre he sido un loco buscando preguntas para crear respuestas...