lunes, 6 de enero de 2014

Necesidad

He tenido una semana bastante fluctuante, tenía que hacer cosas que ya se habían postergado por más tiempo del necesario, en eso estoy ahora, haciendo las cosas que postergué, por miedo, por tonto, porque simplemente no quería ver que ya era urgente hacer las cosas.

Ha sido una semana que comenzó con excesivos cuestionamientos, pensando en matarme, en irme lejos, en escapar de todos y todo, pero gracias a ella y sus palabras me quedé e hice algo para mejorar.

El año nuevo lo pasé internado, con el pensamiento de mejorar, de no volver a intentar, mas bien lograrlo, estuve en total tres días internado hasta que por motivos externos tuve que salir.

Volver a casa, con otra visión, mirando como salí ese día martes de acá, con miedo a poder hacer algo imprudente, volver a casa y saber que ya todo mejorará, que por fin puedo dormir, que hay muchas cosas por las cuales vivir, es algo que alegra a cualquiera, a mi me alegró, por un par de horas, hasta que mi mente comenzó a jugar su juego, a recordarme porque me había internado, a recordarme porque quería morir.

Por suerte descubrí que no estoy solo, que hay personas que no están ahí solo para no quedar mal con la sociedad, que todavía tengo amigos y gente en la cual puedo confiar.

El viernes un llamado me cambió el fin de semana, mi amigo me rescató de mi casa con su mala vibra, me llevó a sus casa y me cambió el pensamiento, hizo todo para que no comenzaran mis pensamientos negativos, me alegró mucho el saber que puedo contar con él en todo momento.

Hoy tuve un día de locura, de cariño y emociones varias, comenzó a las seis y media de la mañana haciendo dormir a mi amiga, porque nos juntaríamos en un par de horas más.

Y ella, mi amiga cósmica, me sorprendió desde el primer instante, regalándome jarabe de papaya, una de mis debilidades, después de eso, recorrimos parte de Santiago y como la primera vez que salimos, le mostré lugares que no conocía, nos contamos la vida como si nos estuviésemos conociendo recién, me regaló toda una gama de sentimientos, incluso me hizo emocionarme con un escrito de Neruda en La Chascona, mojándonos y mojándome en las piletas de la capital

Existen momentos para cada cosa, a veces es necesario volver sobre los pasos para ver donde estuvo el error, pero no debo quedarme ahí, ya descubrí donde todo se fracturó, ahora debo seguir adelante, necesito seguir adelante, no puedo quedarme en el pasado, allá, en algún lugar está mi futuro, si me quedo acá en casa pensando en el pasado y en mi podrido presente, no seré capaz de ir por ese futuro.

Para allá vamos, ya no intento mejorar, ahora lo voy a hacer, no importa cuanto tiempo me tome, tengo que hacerlo, por mí, porque me lo debo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario